La osteopatía aporta una abordaje manual de lo que se llama la primera barrera del sistema inmune que nos ayuda de manera eficaz a mejorar las defensas frente a cualquier enfermedad catarral respiratoria tipo resfriados, bronquitis o bronquiolitis tanto en niños como en adultos.
Últimamente estamos apreciando que la fisioterapia respiratoria convencional que veníamos practicando hasta ahora se nos empieza a quedar algo corta en los tratamientos de las enfermedades respiratorias comunes. Conseguimos evacuar la mucosidad y mejorar la ventilación pero a veces los beneficios conseguidos no duran mucho tiempo.
Vamos a mostrar dos técnicas que efectuamos en osteopatía para complementar las maniobras de fisioterapia respiratoria. El objetivo de estas técnicas es mejorar la función del sistema inmunitario y por tanto ayudar tanto a prevenir las enfermedades respiratorias como a evitar sus complicaciones.
TRATAMIENTO DEL DIAFRAGMA TORÁCICO SUPERIOR
Así se conoce a la musculatura y vísceras que hay en la parte delantera del cuello y suelo de la boca. Aquí se encuentran unos ganglios linfáticos importantes encargados de aportar las células defensivas necesarias en caso de una exposición a algún factor patógeno.
La tensiones y adherencias musculares disminuyen el riego sanguíneo y por tanto el metabolismo de dichos ganglios. Además la presión física directa sobre la estructura también condiciona la función ganglionar.
El tratamiento es rápido, poco invasivo y muy eficaz. Con maniobras de osteopatia fascial y visceral conseguimos eliminar la tensión y adherencia tisular y restablecer la función defensiva local.
Las enfermedades respiratorias comunes: resfriados, gripes, bronquitis, bronquiolitis incluso el covid, suelen ir acompañadas de tensión y adherencia en algún punto del diafragma torácico superior.
TRATAMIENTO DE LOS HUESOS RETRONASALES
Los huesos: maxilar superior, vómer, etmoides y esfenoides se encuentran justo detrás de la nariz que es una puerta de entrada importante de factores patógenos. El bloqueo o la impactación de estos huesos condiciona el estado de la mucosa y con ello la función defensiva, además facilita la congestión de los senos craneales(sinusitis).
El concepto es similar a la técnica anterior pero en este caso con maniobras de osteopatía craneal. La movilización y flexibilización de estos huesos permite drenar los senos craneales y lubricar la mucosa para mejorar el aporte de células defensivas.
Las enfermedades respiratorias antes mencionadas suelen ir acompañadas de la fijación de al menos uno de estos huesos.
Como terapia natural que es, la osteopatía no lucha directamente contra el patógeno causante de la enfermedad. Lo que hace es potenciar los mecanismos naturales del cuerpo que se ven obstaculizados para que sea el cuerpo con sus propios medios quien luche contra la invasión.